Saludos, voces, colores, exclamaciones, algún abrazo aún tímido y muchas mascarillas. Las coordinadoras de las comunidades de la Provincia Teresiana de Europa nos reencontrábamos presencialmente después más de un año de reuniones on line. El último encuentro presencial fue en Ávila también, el 22 y 23 de febrero de 2020. Mucho tiempo sin vernos y un tiempo muy difícil y complicado en toda Europa y en todo el mundo.
Lo primero que me llamó la atención fue el sentimiento agradable de habernos echado de menos, todas. Las más cercanas y las menos, las más conocidas y las que aún nos conocemos bien. Hemos echado de menos el jaleo, las risas y bromas, la eucaristía y los cantos, el baile, las comidas, los grupos de trabajo… ¡Hemos echado de menos muchas cosas! y me produce alegría sentir que son las “cosas de familia” las que de verdad hemos extrañado.
Estábamos deseando tener un descanso o un ratito para charlar con una, preguntar a otra, interesarte por una hermana que ha tenido cambio, por alguna comunidad en especial, por las hermanas mayores…. Los personajes de esta historia tenemos nombre y apellido, pero cada una llevamos detrás los nombres de nuestras comunidades y todas han estado presentes.
Qué buena idea fue también el paseo por la ruta de las leyendas de Ávila, con un guía del ayuntamiento. Un paseo en el tiempo desde la Edad media hasta el siglo de Oro y los tiempos de la Santa. Historias de amor, de fe y de guerra; leyendas que van prendidas en esos rincones de la piedra abulense y la muralla tan queridos por todas. Gracias a las que pensaron en esa ruta para todas, porque también hemos echado de menos pasear juntas por las callejas de la Santa.
Y después de una breve palabra sobre los personajes, el espacio y el tiempo de este encuentro, otra palabra sobre el argumento: la reunión y el trabajo. Un encuentro cargado de muchas informaciones, documentos, noticias… trabajo acumulado que ha ido elaborando el equipo de gobierno, de formación, de economía, secretaría… una carpeta que llegó vacía y se va bien llena de pruebas de que seguimos juntas en camino y retomamos y queremos cuidar los procesos.
Gracias a todas, y en especial al equipo que lo ha preparado. Ahora a hacer posibles los deseos y las palabras y hasta el próximo encuentro de apoyo y trabajo en familia.
Fátima Gil
