26 de octubre de 2022
Los símbolos de las Jornadas Mundiales de la Juventud llegaron al Colegio a las 8:50 de la mañana. Los espacios se cubrieron de colores verde, rojo y amarillo. Los mismos colores predominan en la ropa de los miembros de la Comunidad Educativa: niños, adolescentes, docentes, empleados, hermanas, padres, abuelos… Los símbolos entraron por la puerta de la casa de la comunidad de las hermanas teresianas y desde ahí se hizo un recorrido hasta el salón para tener un momento de celebración: ¡todos fueron invitados a ayudar a Jesús a llevar la cruz!… A continuación caminaron hasta la entrada principal de nuestro Colegio donde se tomó una fotografía de la Familia Teresiana reunida alrededor de la Cruz de Jesús y el icono que representa a María, madre de Jesús.
Algunos testimonios:
Madalena Marques
“El paso de los símbolos de la JMJ por nuestra casa provocó en mí variedad de sentimientos: el gozo de la unidad de todos los jóvenes que en agosto del próximo año celebrarán el gran encuentro festivo y de fe en Lisboa; alegría de sentirse parte de la Iglesia, en esta ciudad de Santo Tirso; profundo agradecimiento por colaborar en llevar la cruz; satisfacción de ver a nuestros niños y jóvenes felices de participar en el evento; ternura interior al ver que los símbolos de la JMJ pasaban por el espacio comunitario.”
Conceição Monteiro
Al pasar los símbolos de las jornadas de la JMJ 2023 por nuestro Colegio fue un momneto muy bonito, gratificante y emocionante.
Sentí la alegría interior de el gozo interior de la alabanza que me invitaba a dar gracias a Dios. Me di cuenta de que la armonía de nuestros corazones se reflejaba en los rostros de todos. La Cruz Peregrina y el Icono de María fueron acogidos con entusiasmo y alegría por los alumnos, docentes, empleados, hermanas y demás personas que quisieron participar con nosotros de este encuentro, que Dios ha regalado a toda la comunidad educativa de nuestro Colegio de Santa Teresa de Jesús. Sin duda quedará marcado y grabado para siempre en la memoria y el corazón de todos.
Ana Maria Cunha
Viví con inmensa alegría el momento en que llegaron a nuestro Colegio los símbolos de las Jornadas Mundiales de la Juventud. Fue un momento que me ayudó a profundizar mi fe, dar gracias por el gran amor que me tiene Jesús al dar su vida por mí, por la Humanidad. Recordé con nostalgia al Santo Padre Juan Pablo II que tomó la iniciativa de crear estas Jornadas para jóvenes creyentes y no creyentes.
Saber que estos símbolos ya han dado la vuelta al mundo… era motivo de acción de gracias y, al mismo tiempo, de oración pidiendo por todos aquellos que están preparando los próximos viajes en Portugal, o en nuestro país.
Que Jesús, Vivo y Resucitado, transforme la vida de cada joven o adulto que está viviendo esta experiencia de fe en Aquel que nos ama infinitamente.