La hermana María de Jesús Freitas ha tenido la dicha de partir hacia la casa del Padre en el día en que la Iglesia celebra la fiesta de S. Francisco de Asís, el santo amante de la naturaleza y precursor de la ecología; un santo que nos dejó el ejemplo de vida evangélica de pobreza y humildad.
La hermana María nació en Prazins – Guimarães el día 05 de Noviembre de 1929. Ingresó en la Compañía de Santa Teresa de Jesús, en el noviciado de Braga, el día 02 de febrero de 1949, a los 19 años de edad. Durante su vida como teresiana pasó por varias casas donde se entregó de alma y corazón a la misión evangelizadora: Braga, Santo Tirso, Lisboa y Oporto fueron las ciudades por donde pasó haciendo el bien. En agosto de 2017 dejó de pertenecer a la comunidad de Oporto y pasó a residir en la Residencia Teresiana de Braga, donde vivió sus dos últimos años que fueron marcados por las limitaciones de salud que dieron continuidad a la misión y proyecto de vida que Dios tenía para ella. Dedicó toda su vida de consagrada a los servicios auxiliares en las obras y comunidades donde vivió. Una vida sencilla, silenciosa y dedicada al servicio de la misión.
La Compañía de Santa Teresa de Jesús agradece profundamente la vida, la entrega y toda la dedicación de nuestra querida Hermana María a quien rendimos nuestro sentido homenaje y pedimos a Dios que la guarde en su Amor.
Creemos que, en el misterioso paso de esta vida hacia el Padre, la hermana María ya recibió el abrazo del Señor a quien amó y por quien se entregó totalmente, al servicio de los hermanos.
