El pasado 7 de marzo organizamos en la ciudad de Tetuán un acto interreligioso entre las tres grandes religiones que históricamente han convivido juntas en este país: el islam, el cristianismo y el judaísmo.
Desde que llegamos aquí, al norte de Marruecos hace un año, las tres hermanas de la comunidad nos propusimos trabajar en el diálogo interreligioso. Nos parecía muy importante dar pasos en este sentido, en un país 100% musulmán y donde la religión lo impregna todo. Es por eso, que estamos muy contentas de que hayamos podido iniciar este camino de diálogo, y que hayamos podido realizar este acto, inédito en esta ciudad y con la asistencia de unas 300 personas.
El motivo del encuentro era simbolizar nuestro deseo de convivir en paz y fraternidad. Por eso nos unimos varias asociaciones marroquís y la Iglesia Católica para prepararlo. Pensamos que la visita del Papa a Marruecos a finales de marzo era un buen motivo para comenzar nuestro viaje.
En el acto participaron, como representantes de cada religión, el arzobispo de Tánger, Mons. Santiago Agrelo, el Rabino de Tanger, Jacob Tordjmane, e Ismail Bechir Alami, del Centro de Creencias y Religiones de Rabat, como representante musulmán.
El tema del Acto fue la Acogida y la Hospitalidad. Cada uno de los representantes dio unas pequeñas pinceladas de cómo la acogida y la hospitalidad hacia el otro, el pobre, el extranjero, ha estado en la el núcleo de la fe y la práctica del judaísmo, del cristianismo y del Islam.
El momento central del acto fue el momento del compromiso y el simbolismo: se leyó y firmó el Manifiesto 7M Tetuán, en el que expresamos nuestro compromiso de trabajar juntos para que la religión no nos separe. El manifiesto comienza así: “Nosotros, creyentes; musulmanes, cristianos, judíos y personas de buena voluntad en la ciudad de Tetuán, nos queremos comprometer seriamente en la difusión de la cultura de la tolerancia, de la convivencia y de la paz.”
Por último, los tres representantes nos ofrecieron la luz de cada religión a todos los asistentes sin distinción de credos, y con ella formamos la palabra acogida en árabe y español.
Ana Royo, stj.