Más de 50 años en el barrio de “Las Delicias” al servicio de la educación.
En el mes de marzo de 1963, el Sr. Arzobispo de Zaragoza llamó a la M. Superiora del Colegio Teresiano del Pilar, María Altolaguirre, y le pidió ayuda para establecer un colegio en el Barrio de las Delicias. A partir de ese momento se puso en marcha la fundación de la Sección Filial nº 1 del Instituto Miguel Servet, el Colegio “Padre Enrique de Ossó”.
Nuestro colegio abrió sus puertas el curso 1963-64 en unos pisos de la calle Caspe, con una matrícula de 75 niñas. Su primera directora fue Dña. Rafaela Cámara, seglar y profesora del Instituto de Jaca, ya que la legislación así lo exigía. Por fin, tras superar numerosos inconvenientes, el 24 de septiembre de 1967 se bendijo e inauguró el actual colegio, dirigido ya por una Hermana y en su actual ubicación, uno de los barrios obreros de la ciudad, la parcelación de la obra sindical “Hogar Alférez Rojas”. Desde entonces, el centro ha ido creciendo y se ha ido modernizando, mejorando mucho sus instalaciones. Desde el curso 2011-12 forma parte de la Fundación Escuela Teresiana y cuenta con cerca de 800 alumnos, en dos líneas desde Infantil hasta Bachillerato, con aulas de PMAR y FPB (Servicios Comerciales), todas ellas concertadas.
Si algo es característico de nuestro colegio es su capacidad de acogida y cercanía. Somos una comunidad educativa abierta y comprometida con el entorno; plural y multicultural, inclusiva, sencilla e inserta plenamente en el barrio de Delicias, donde somos queridos y valorados por la calidad de nuestra oferta educativa y la calidez de nuestro acompañamiento personalizado. Tratamos, por todos los medios, de cuidar las relaciones con Dios, con las personas, con el medio ambiente, al estilo de Enrique y Teresa.
Algunos de nuestros proyectos más valorados, que reflejan nuestro modo de vivir el espíritu teresiano, son: “Agenda Feliz”, de ApS; “Corosol”, el coro solidario; la “Escuela de Atletismo E. de Ossó”, fomentando valores y cosechando éxitos deportivos; las “Jornadas Deportivo Culturales” y el “Día de FundEO”, con gran participación de familias, profesores y alumnos voluntarios…
Hoy seguimos entusiasmados por una educación teresiana que “desde dentro” transforma la realidad, comprometidos con una misión: la educación integral de nuestros alumnos, razón y sentido de nuestro proyecto educativo.
